martes, 28 de octubre de 2008

Brigadistas

En la guerra civil española, las Brigadas Internacionales eran unas unidades compuestas por voluntarios extranjeros de 54 países de todo el mundo que lucharon junto al ejército leal a la República española frente al dirigido por el militar que se creia imbuido de la gracia de dios,es decir el enano del bigote, que era ayudado por los ejércitos regulares de Hitler y Mussolini.

Al menos 600 argentinos cruzaron el Atlántico para defender la República durante la guerra civil española, algunos murieron, otros fueron encarcelados y casi todos cayeron en un olvido del que han sido rescatados por un grupo de historiadores locales empeñados en recuperar su memoria.

Sus historias han sido recogidas en el libro 'Voluntarios de Argentina en la Guerra Civil Española', elaborado por un equipo de investigadores de Mar del Plata, a unos 400 kilómetros al sur de Buenos Aires. Los brigadistas argentinos, explica el historiador y coautor del libro, Jerónimo Boragina, en una entrevista con Efe, integraron el segundo mayor contingente de voluntarios latinoamericanos en defensa de la República, sólo superados por los cubanos, unos 1.200. El grueso terminó en la Brigada Lincoln, encabezada por estadounidenses, canadienses e ingleses, y una minoría se incorporó al ejército republicano. Aunque cientos murieron y fueron heridos en la guerra, muy poco -lamenta el historiador- se ha hablado del papel de los brigadistas latinoamericanos. '¿Cuál es el criterio que se toma para estudiar la Historia?. Los norteamericanos y los canadienses están en todos los listados e investigaciones, ¿por qué los latinoamericanos no están?', se pregunta Boragina. En el caso de Argentina 'se puede hacer otra historia de la guerra civil en el país, porque tiene la comunidad española más grande de América Latina', sostiene. Los voluntarios argentinos, en su mayoría campesinos y obreros, militantes del Partido Comunista y jóvenes anarquistas, sortearon las barreras del régimen local para sumarse a las brigadas internacionales. Hubo, relata Boragina, 'un gigantesco movimiento de solidaridad' con la República entre la izquierda argentina, que se movilizó para conseguir dinero y alimentos y organizó cientos de comités de solidaridad. Tras la derrota republicana, la mayor parte se exilió en Francia y progresivamente se repatrió a Argentina, aunque muchos quedaron en campos de concentración franceses o en cárceles españolas. Los que regresaron a Argentina enfrentaron acusaciones y procesos judiciales, aunque, según explica el historiador, nunca fueron sentenciados. Muchos se integraron en asociaciones de veteranos vertebradas en torno al Centro Republicano Español y mantuvieron su lucha contra el franquismo y en defensa de la liberación de sus compañeros presos. Sólo tres: Luis Alberto Quesada, Juan Arhaucet y Manuel Villar, fueron condenados a mue rte o cadena perpetua por la dictadura y liberados por intermediación del gobierno de Arturo Frondizi (1958-1962) ante el régimen franquista. Quesada, nacido en Argentina de padres españoles, se enroló en el ejército republicano con 16 años y llegó a ser el comisario de brigada más joven de España. Luchó durante tres años en el frente y, tras el triunfo del bando nacional, fue internado en un campo de concentración en Francia; combatió con la Resistencia hasta que regresó a España, donde fue traicionado, detenido y condenado a muerte. Las gestiones de su familia en Argentina y la presión internacional lograron que se conmutara la pena por cadena perpetua. Pasó 13 años en cárceles españolas, la mayor parte en el penal central de Burgos, en el que desplegó una intensa actividad cultural y participó en el grupo 'La Aldaba', que elaboraba revistas clandestinas. Tras su liberación, fue condenado al destierro perpetuo y regresó a Argentina. Quesada, que tiene 89 años y vive en Buenos Aires, no abandonó nunca la lucha contra el franquismo, un episodio hoy borrado de su memoria por el alzheimer. Alfonso Jacinto Gorosabel nació en el barrio porteño de San Telmo, viajó a España en 1929 con sus padres españoles y luchó con el ejército republicano cuando estalló la guerra. Herido en el frente, pasó a Francia y fue recluido en el campo de Argeles sur Mer hasta su repatriación a Argentina. Se instaló en Mar del Plata y abrió un bar que se ganó el sobrenombre de 'la Emb ajada' porque se convirtió en centro de referencia de la colonia española. Murió en julio de 2003 y sus cenizas fueron esparcidas en el parque del Centro Republicano Español de Mar del Plata. Unas vidas de película que, lamenta Boragina, no han tenido el reconocimiento que merecían. 'El gobierno español ofreció la ciudadanía a varios brigadistas, pero el reconocimiento del gobierno argentino fue nulo', denuncia. 'Abandonaron a su familia, al país, a los amigos, fueron gratis, dieron la vida para ayudar a la República y al pueblo español, qué mejor que reivindicarlos. Sólo eso ya es un buen motivo para rescatarlos, en nuestra historia, en nuestra memoria', concluye. Leido aqui Durante el desfile de despedida, la histórica dirigente del Partido Comunista de España señaló: “¡Camaradas de las Brigadas Internacionales! Podéis marchar orgullosos. Sois la historia, sois la leyenda, sois el ejemplo heroico de la solidaridad y de la universalidad de la democracia. No os olvidaremos; y cuando el olivo de la paz florezca, entrelazado con los laureles de la victoria de la República española, ¡volved!... Volved a nuestro lado, que aquí encontraréis patria los que no tenéis patria, amigos los que tenéis que vivir privados de amistad, y todos, todos, el cariño y el agradecimiento de todo el pueblo español, que hoy y mañana gritará con entusiasmo: ¡Vivan los héroes de las Brigadas Internacionales" Este es el himno de las brigadas internacionales:

País lejano nos ha visto nacer.
De odio, llena el alma hemos traído,
mas la patria no la hemos aún perdido,
nuestra patria está hoy ante Madrid,
mas la patria no la hemos aún perdido,
nuestra patria está hoy ante Madrid.
Camaradas, cubrid los parapetos,
que la vida no es vida sin la paz.
Defended con el pecho vuestros hijos,
os ayuda la solidaridad;
defended con el pecho vuestros hijos.
os ayuda la solidaridad.
Libre España de castas opresoras,
nuevo ritmo el alma batirá,
morirán los fascismos sangrientos,
en España habrá ya felicidad;
morirán los fascismos sangrientos,
en España habrá ya felicidad.
Generales traidores a su patria
del fascismo quieren saciar la sed;
mas los pueblos del mundo defendemos
lo que España jamás ha de perder;
mas los pueblos del mundo defendemos
lo que España jamás ha de perder.
Guerra al pueblo no hacemos como ellos,

pues nosotros luchamos por la paz,
con el triunfo del mundo antifascista
la tierra ensangrentaran;
con el triunfo del mundo antifascista
la tierra ensangrentaran.
Si al combate marchamos con arrojo
para España obtendremos libertad.
Morirán los fascismos sangrientos,
en España habrá ya felicidad;
morirán los fascismos sangrientos,
en España habrá ya felicidad.
Desde este humilde blog vaya mi agradecimineto a esos miles de ciudadanos del mundo.

19 comentarios:

PARA LA LIBERTAD dijo...

Un buen post, gracias por tus comentarios.

Saludos

RGAlmazán dijo...

Los brigadistas internacionales fueron la única ayuda exterior que el gobierno legítimo recibió. Hombres, y alguna mujer, que defendieron la democracia y los valores que representa, por encima de banderas.
Un ejemplo que hoy todavía no hemos sido capaces de difundir suficientemente.
Salud y República

Duende Crítico dijo...

Gracias por hablarnos de esos argentinos que se lanzaron a luchar en otras tierras por las ideas que tenían sin querer recibir nada a cambio.

Perséfone dijo...

Que junto al tuyo vaya también el mío.

Y un abrazo.

Esther dijo...

La verdad es que tenían mucho mérito ,pues no era su país, no era su causa y vinieron a ayudar solidariamente,es lógico que tu estés agradecido y todos y se les haga este reconocimiento público.

Muchos besos amigo

Freia dijo...

Y mi agradecimiento para ti por recordarlos.
Un abrazo muy fuerte Navegante

Naveganterojo dijo...

Para la libertad, gracias a ti, por el blog tan magnifico uqe tienes.
Un saludo.

Rafa,parece ser que esta semana se estan ofreciendo omenajes a los brigadistas en distintas partes del mundo, pero...¿se comenta algo al respecto en los informativos de las cadenas generalistas?.
Un verguanza para no variar, silencio absoluto, y olvido vergonzoso.
Salud y republica.

duende,Amigo, gracias a ti por tus visitas, se que andas muy liado.
Un saludo.

persefone,gracias por tu granito de arena, un abrazo tambien para ti.

Esther, es cierto, tenian un merito y un amor a la libertad fuera de lo normal, piensa que jamas se habia dado una historia como esa y no se ha vuelto a dar nunca,¿por que seria?.
Un abrazo amiga mia.

Freia, no me tienes que agradecer nada, lo ago con gusto y con vuestros comentarios me doy por satisfecho.
Un fuerte abrazo.

Gaviota dijo...

Gracias por llenarme mas de conocimientos de historia!!!!


Muchas gracias, por permitirme tomar el espacio libre de trll

Naveganterojo dijo...

Gabiota, gracias a ti por tus visitas,
el logo.....ojala te funcione.
Un saludo

Esther dijo...

Hola! me había aparecido en el blog roll que habías posteado algo hace una hora y vine a ver,pero veo que no,pero no me podía ir sin dejarte un saludito :)

Un beso

Naveganterojo dijo...

Esther, ha sido un error mio, pues la musica que he puesto ahora, la envie a las entradas en vez de al sidebar,(aun soy un poco torpe en esto de la informatica).
Un abrazo

Isa dijo...

Hola Navegante,
pasaba a leer tu blog, pero ¡es enorme! jeje.
Seguro que es estupendo, pero estoy muerta de sueño... así que lo dejo para mañana, vale?
De momento te dejo un beso.
Y muchos abrazos!! ; ))

María dijo...

Mira que siempre aprendo de tus posts tienes conocimiento de muchas cosas que yo en cambio de otras muchas desconozco.

Gracias por seguir.

Saludos.

La Gata Coqueta dijo...

Estaba leyendo lo que has puesto muy bueno por cierto y estaba pensando todos esos pobres chicos que vienen a defender no su patria, si no el recuerdo de sus antepasados... y mira por donde así es al seguirte y como bien dices perdidos en el olvido y una vida destruida y sin querer la de sus progenitores... muy fuerte y al final no existen.
Un abrazo, nos vemos aunque sea por mi parte después de cinco semanas por razones de salud.

Ginebra dijo...

Me ha encantado esta entrada sobre las Brigadas Internacionales. Hice un trabajo en los cursos de doctorado sobre éstas y desde entonces me interesa leer lo que encuentro, por éso tu bibliografía recomendada es genial.
No tenía idea de los datos, no pensé que los brigadistas argentinos fuesen mayoría, efectivamente como dices, no lo había visto escrito en ningún sitio.
Muchos besos y buenos días.

Cemanaca dijo...

Te dejo mis más sentidos agradecimientos por tus mensajes de apoyo que recibí a través de la distancia en mi blog, teñido por la tristeza en la partida de mi angelito.
te envío mis afectuosos saludos conversos

Naveganterojo dijo...

Isa, bienvenida de nuevo, a ver cuando comienza a dar tus siguientes pasitos y arrancas de nuevo el blog.
Muchos animos y adelante amiga.

Maria, creo que todos aprendemos de todos, tu aprendes algo de este blog y yo aprendo humanidad del tuyo.
Un abrazo.

Amiga gata, he estado pendiente de ti y afortunadamente ya comienzas a sacar de nuevo las uñas, espero y deseo que tu salud valla en aumento y que tus animos la acompañen.
Mejorate amiga.
Un abrazo.

Ginebra, cuando escribi esta entrad pensaba en que os pareceria a Rafa (un amigo) y a ti, y creo que acerte en mis pensamientos,ja,ja.
De todos modos aun queda mucho por sacar de los recovecos de la memoria, los brigadistas no solo nos dieron su apoyo, ademas sufrieron tanto como los españoles a los que defendieron.
Un abrazo.

Cemanaca.....que decirte, amigo ese angel tan precioso que nos ha dejado iluminara tu camino y no permitira que viajes en la oscuridad.
Te mando muchos animos y un fuerte abrazo.

MATISEL dijo...

Mientras muchos países nos daban la espalda, sin querer ver que esto solo era el principio de lo que se avecinaba, muchos valientes llenos de esperanzas vinieron a apoyar la República y gracias a la memoria y la constancia de unos cuantos como tú, se siguen recordando.

Besos

Esther dijo...

que historias más tristes crueles.. y una me ha sobrecogido sobre manera.. pues la que dices que pasó en paterna, Valencia es de un pueblo cercano al mío, donde encima mi madre y mi abuelo el que era militar vivieron,pero no en ese año porque mi madre aún no había nacido..

Tan cerca hubieron esas crueldades que sobre coge,aunqeu las que han pasado lejos se sienten igual..

Tú como siempre como buena persona que eres estás al lado del bueno, inocente...gracias por ser asi

besitos