sábado, 9 de enero de 2010
Hasta siempre
miércoles, 30 de diciembre de 2009
Feliz año
martes, 22 de diciembre de 2009
FELICES FIESTAS
miércoles, 9 de diciembre de 2009
Hasta pronto
sábado, 5 de diciembre de 2009
Mejorando...que es gerundio
miércoles, 2 de diciembre de 2009
Ha llegado la gripe....C
- 1º, mucha vitamina C.
- 2º, un quemadillo.
- 3º, calditos y miel.
- 4º, vapores de eucalipto.
- 5º, kiwi y perejil.
- 6º, zumitos, guiski.
- 7º, leche, miel, coñac.
- 8º, camita, calor.
lunes, 30 de noviembre de 2009
domingo, 29 de noviembre de 2009
Ellos, siempre ellos.
- Huelen a muerto las sotanas que acechan como alimañas
- en la noche mas larga....la del hambre el silencio y la rabia
- no se paran ante nada y clavan como una garra la cruz y la espada
- Orden, religión y patria, sangre ibérica y fe cristiana,
- rosarios,misas y curas, cantos pueriles que amedrantan
- vigilan conciencias y las atan ahogando pechos y gargantas
- Esta es la iglesia de España
- Extirpa al rojo de este pueblo, y hazle ver con el suplicio
- que el demonio esta en su cuerpo y la cuneta es el único del medio
- con aceite de ricino humilla y rapa a la madre, a la compañera, a la hermana,
- a la hija del condenado por la justicia de dios
- es el merecido trato... y la muerte metida en casa
- Extirpa al rojo de este pueblo y hazle ver con el suplicio
- que el demonio esta en su cuerpo y la cuneta es el único remedio
- Por que en su nombre los matan...porque en su nombre los matan
- Ahora quien ruge es el silencio impuesto enterrando las voces en este maldito tiempo
- Tierra de conejos, país de madrigueras
- ¿cuantos huesos se han tragado las cunetas ?
- y danzan... y danzan... y danzan las sotanas alrededor del fascismo
- que las proclama valedoras de la raza y de la santa cruzada
- Su monumento a los Caídos de vergüenza se desangra
- de vergüenza se desangra, de vergüenza se desangra.
viernes, 27 de noviembre de 2009
Asesinado y mutilado
jueves, 26 de noviembre de 2009
Más de mil vidas en una medalla
Barrancos ha servido en numerosas ocasiones de refugio para extremeños que, por una causa u otra, se veían obligados a huir de España. Lo fue a principios del XIX, por ejemplo, para los liberales que escapaban de los Cien Mil Hijos de San Luis, y poco antes de la guerra civil también para los propietarios de tierras que huían de las revueltas agrarias. "Los mismos ejércitos portugueses han llegado a saquear Barrancos en varias ocasiones porque allí se habían refugiado castellanos", dice el alcalde de Oliva.
Pero el episodio más conocido, y el que está propiciando más apoyos para que a Barrancos le den la Medalla de Extremadura, es el que hizo posible salvar la vida a más de un millar de refugiados que escapaban del ejército franquista a fines de septiembre de 1936. Procedían en gran parte de poblaciones cercanas, como Villanueva del Fresno, Oliva de la Frontera, Valencia del Mombuey o Jerez de los Caballeros, los últimas de la región en ser tomadas por las tropas de Franco.
Hasta ese momento, la práctica habitual en Portugal era la de devolver a España a los refugiados civiles que cruzaban la frontera, lo que en realidad era casi como condenarlos a muerte, ya que, en su mayor parte eran fusilados de inmediato. Sin embargo, en el caso de Barrancos, estas mil personas fueron agrupadas en dos campos de acogida acondicionados en la frontera del río Ardila, frontera natural entre los dos países.
Allí fueron defendidos de los ataques de las milicias falangistas por los militares lusos, al mando de los tenientes Antonio Agusto de Seixas y Oliveira Soares. Este último llegó incluso a acercarse a las posiciones españolas para asegurar que, si se volvían a repetir los disparos desde el otro lado de la frontera, responderían abriendo fuego con sus ametralladoras. "Estábamos escondidos detrás de las piedras y nos empezaron a disparar los falangistas desde España. Se montó en el caballo y se fue a ellos", recuerda Manuel Méndez, que vivió esta experiencia con 20 años --ahora tiene 92-- junto con su hermano menor. Manuel había tenido que huir de Oliva de la Frontera por su pertenencia al sindicato UGT. Dos compañeros suyos que intentaron refugiarse con anterioridad en Barrancos, no tuvieron la misma suerte. Fueron devueltos y fusilados.
Pero el apoyo a los refugiados no llegó solo desde los militares. "Gente de Barrancos hizo suscripciones para poderlos alimentar", reseña Angel Hernández, uno de los directores del documental Los refugiados de Barrancos. "Mi abuela era una viuda que vivía con cuatro hijos en una casita pequeña. Acogió en ella a diez españoles, dos familias grandes, durante muchísimos meses", rememora el alcalde de Barrancos. "El cura llevaba comida a los refugiados, y el médico, que era de derechas, también fue solidario siempre. La población se volcó toda".
Una vez acabada la guerra, Manuel Méndez, tras pasar por el campo de concentración de Alicante, volvió a Oliva, donde montó una bodega de vinos y mistelas. La suya fue una de las más de mil vidas que pudieron continuar gracias a lo que sucedió en Barrancos. "Hay historias preciosas, y gente que aún hoy vive gracias a lo que pasó allí". Visto en:El Periodico de Extremadura